Si estás valorando la posibilidad de hacerte con un buen clásico para coleccionarlo, y además tenerlo como inversión de futuro, te proponemos un listado de ocho automóviles con un claro valor al alza. En algunos casos, los precios son muy razonables.
Alpine A310: el modelo que marcó un antes y un después en la firma de Dieppe
La marca francesa, que se fundó en 1955 y que fue adquirida por Renault en 1973, hizo una pausa en 1995, casualmente 40 años después de su creación, una decisión que todavía no se termina de entender por el valor añadido que ha perdido Renault durante un montón de años. No obstante, en 2016, la cúpula directiva de la firma del rombo, decidió relanzarla para generar una marca de corte Premium dentro de su cartera de productos. El primer modelo en llegar ha sido una acertada reinterpretación moderna del A110 clásico de toda la vida, un coche que está siendo un éxito, y que, al mismo tiempo, está sirviendo para que todos los clásicos de Alpine sean piezas de colección cada vez más apetecibles.
Podríamos elegir el último Alpine de la anterior época, el A610, pero hemos decido decantarnos en este artículo por el A310, un clásico que irá ganando mucho valor con el paso del tiempo y que marcó el futuro de los modelos de la marca hasta 1995. Ahora mismo, es una muy buena oportunidad de hacerte con uno, pues su precio se sitúa en torno a los 30.000 euros. Además, casi la totalidad de las unidades que están actualmente disponibles en cualquier portal de compraventa, se encuentran en muy buen estado y gozan de un kilometraje bastante moderado.
En Soul Auto hemos subastado con éxito alguna unidad, que han ido a parar a manos de coleccionistas, sin duda para disfrutar unos años, al mismo tiempo que dejan “madurar” para sacar rendimiento a su inversión, con una revalorización segura de su Alpine.
El Alpine A310 supuso un salto de gigante en todos los apartados respecto al mítico A110, modelo al que reemplazaba. Su vida fue bastante longeva, pues se comercializó desde el año 1971 a 1984. Técnicamente, contaba con un bastidor tubular, suspensión independiente con dobles triángulos, un motor ubicado en posición central y una carrocería fabricada en fibra de vidrio, todo ello para intentar rebajar el peso todo lo posible. Inicialmente, se comercializó con un modesto motor de cuatro cilindros que alcanzaba 115 CV. Sin embargo, en 1977, recibió, como agua de mayo, al conocido motor PRV V6 de 2.7 litros y 150 CV. Con esta motorización, desarrollada conjuntamente por Peugeot, Renault y Volvo, el A310 dio el salto de calidad que necesitaba, consiguiendo unas prestaciones a la altura de lo esperado; alcanzaba los 220 km/h y aceleraba de 0 a 100 km/h en 7,8 segundos.
BMW Z4 Coupé: tan exclusivo como especial
El BMW Z4 Coupé E85, heredero del Z3 Coupé, es uno de esos modelos apetecibles que subirán de precio como la espuma no tardando mucho tiempo. Su exclusividad, una de sus grandes bazas, hace que este coche sea un tanto especial. Puedes encontrar unidades -hay muy pocas con precio desde 16 – 18.000 para el motor pequeño.
Esta carrocería, que es prácticamente inédita, estuvo disponible desde 2006 a 2008. Contaba con una gama de motores muy apetecible. Se ofrecía con dos motorizaciones de gasolina atmosféricas de 6 cilindros en línea, de 265 y 343 CV. La más potente lucía el apellido M, una letra que en BMW no necesita presentación. Si encuentras una buena unidad, podrás disfrutar de unas prestaciones de alto nivel, ya que alcanza los 250 km/h de velocidad punta y una aceleración de 0 a 100 km/h en tan sólo 5,0 segundos.
La disposición de este coche es la habitual en la marca; motor delantero y tracción trasera. No era particularmente cómodo, ni tampoco fácil de conducir si se quería ir rápido, pero su conducción, por aquello de ir muy cerca del suelo y contar con dos muy buenos motores, hacía que este coche fuera muy apetecible de conducir.
Con motivo de la inauguración del Concorso d’Eleganza Villa d’Este 2023, BMW desveló hace unas semanas un interesante GT que respondía a la denominación BMW Concept Touring Coupé. Este modelo, basado técnicamente en el actual Z4, es una clara inspiración del Z4 que está protagonizando estas líneas. De momento, es un concept que se ha dejado ver para ver qué aceptación tiene, y su producción podría llevarse a cabo en un corto plazo de tiempo.
Honda S2000: un roadster japonés de culto
El descapotable Honda es un coche muy cotizado que era caro en su día y, actualmente, lo sigue siendo. Si lo valoras como inversión, es posible que no sea de los más interesantes que aquí te proponemos, pero tampoco cabe duda que es y será un coche muy valioso.
En España, hay muy poquitas unidades a la venta, por lo que es más recomendable sondear el mercado alemán de ocasión, donde la cantidad es infinitamente mayor. Entre unos 20.000 y 30.000 euros encontrarás bastantes opciones muy apetecibles en un estado francamente bueno.
El S2000 es un japonés en estado puro que te resultará sumamente agradable de conducir, gracias al motor, al tacto de la dirección y al buen trabajo de las suspensiones. El primer modelo se lanzó en 1999, y dejó de comercializarse en 2006. Entre medias, recibió un ligero lavado de cara para ponerse al día.
Este descapotable de dos plazas, techo de lona, motor central delantero longitudinal y tracción trasera, estuvo disponible con un motor de gasolina típico de Honda. Es decir, atmosférico de cuatro cilindros aderezado con la archiconocida distribución variable de la marca japonesa. Esta motorización tenía una cilindrada de 2.0 litros y entregaba una potencia de 241 CV a 8.300 rpm. Conocido internamente como F20C, este motor evolucionó para incrementar su cilindrada hasta los 2.2 litros. La potencia no sufrió variaciones.
Jaguar XK: una magnífica inversión
Al igual que el BMW Z4, el modelo británico está disponible con carrocería coupé y descapotable. Se trata de un coche muy interesante si quieres un buen clásico para coleccionar a un precio muy económico si se tiene en cuenta el caché del producto. Por unos 15.000 euros ya hay unidades muy interesantes, y si ya quieres subir el escalón y acceder a versiones con más picante y menos kilómetros, entre 20.000 y 32.000 euros hay alternativas recomendables.
Del XK hay poco que descubrir, pues se trata de un gran turismo británico muy bien hecho que tiene la elegancia por bandera. Sin duda, es uno de los modelos más interesantes por su buena relación entre calidad, categoría y precio.
Esta primera generación estuvo presente en el mercado entre los años 1996 y 2006. Basado en la plataforma convenientemente modificada del Jaguar XJS, el XK estaba disponible con un motor de gasolina V8 de 4.0 litros que se ofrecía con dos niveles de potencia; 290 y 370 CV, este último reservado para la versión deportiva XKR.
A lo largo de sus 10 años en el mercado, Jaguar nos regaló una serie de ediciones limitadas especialmente pensadas para los entusiastas de la marca. La primera fue el XKR Silverstone, que se lanzó al mercado en el año 2000 para celebrar el regreso de Jaguar a la Fórmula 1 (sólo se fabricaron 600 unidades). La segunda fue el XKR 110, que salió a la venta en 2002 y sirvió para homenajear al fundador de la escudería Jaguar Racing – se fabricaron 1.000 unidades; 500 para la versión coupé y 500 para la versión descapotable -. La tercera fue el XK· Portfolio, que se lanzó en el año 2004 y se diseñó para el mercado estadounidense – se fabricaron 200 unidades -. La cuarta y última versión fue la que respondía a la denominación XKR-S 4.2, que salió en 2005 y que casi hizo acto de presencia para despedir la primera generación de este modelo. Se trataba de una edición con detalles estéticos exclusivos, tanto en la carrocería como en el interior.
Lotus Exige: un valor seguro
Nacido en el recién estrenado siglo XXI, el deportivo británico se le puede considerar un valor seguro como inversión, y un divertidísimo deportivo si lo que se valora, por encima de todo, es la conducción. Compacto, ligero y con una magnífica relación peso-potencia, el pequeño deportivo británico es un coche con personalidad propia.
Sin perder nunca el concepto inicial del modelo, el Exige, que dejó de fabricarse en diciembre de 2021, se comercializó durante 21 años y estuvo presente en el mercado con un total de tres generaciones.
El precio varía mucho en función de la versión elegida. No obstante, en cualquiera de los casos, es una magnífica opción de compra que va a ir ganando valor con el paso del tiempo. Más aún, si tenemos en cuenta que Lotus ya no lo fabrica.
La primera serie, lanzada en el año 2000, es posible que sea una de las más cotizadas por la escasez de unidades. Basada en el Elise, tenía la peculiaridad de montar un motor de origen Rover con una cilindrada de 1.8 litros. Esta motorización se ofreció con dos niveles de potencia; 179 y 190 CV.
En 2004 llegó la segunda serie, que mejoró considerablemente a la primera. Ésta, ya equipaba un fiable motor Toyota de idéntica cilindrada al anterior de Rover, y que, inicialmente, se comercializó con una potencia de 192 CV. Esta generación, se ofreció con infinidad de versiones.
La tercera y última generación del Exige aterrizó en 2011. Una de las principales novedades fue la llegada de una motorización V6 sobrealimentada con compresor, que le permitió, al ágil deportivo de Lotus, dar un salto considerable en cuanto a potencia se refiere, pues se alcanzarían los 430 CV. Al igual que su predecesor, la colección de versiones y ediciones especiales es prácticamente interminable.
Porsche Boxster (986): el patito feo que se convirtió en cisne
El Boxster, que hasta hace bien poco era uno de los modelos de Porsche menos cotizados, ya se puede considerar un futuro clásico que irá ganando valor con el paso del tiempo.
Ahora mismo, por unos 13.000 euros, puedes encontrar unidades muy interesantes de la serie 986, la primera de todas. La mayoría de ellas, como es norma en este tipo de coches, se encuentran en muy buen estado, disponen de buen historial de mantenimiento y exhiben un aspecto impecable, aunque superen los 100.000 kilómetros. Como inversión, es posible que este modelo sea el más interesante de todos.
El Porsche Boxster 986 es un descapotable biplaza con techo de lona que se lanzó al mercado en el año 1996. Inicialmente, estuvo disponible con un motor bóxer de 6 cilindros que contaba con una cilindrada de 2.5 litros y 204 CV.
Con el cambio de siglo, concretamente en el año 2000, recibió un lavado de cara que sirvió para incorporar un motor de mayor cilindrada y potencia, concretamente un bloque, también bóxer y de seis cilindros, que contaba con una cilindrada de 2.7 litros y una potencia de 220 CV. Más adelante, la gama se completo con una nueva versión, denominada Boxster S, que recibía una motorización de 3.2 litros y 252 CV.
A finales de 2002, el Boxster 986 recibió un nuevo lavado de cara para alargar su vida dos años más, antes de dejarse de fabricar y dejar paso a una nueva generación. Esta serie contaba con una carrocería reestilizada y con motores más potentes, de 228 y 260 CV.
Renault Sport Spider: único, muy exclusivo e irrepetible
El Spider es uno de esos coches concepto que, afortunadamente, pudo ver la luz para deleite de los más puristas. Es un coche que nació para celebrar, de alguna forma, el éxito que estaba teniendo Renault en la década de los 90 en la categoría reina de la competición; la Fórmula 1.
La barchetta francesa era un modelo concebido para centrarse única y exclusivamente en la conducción. Con un concepto basado en los modelos de Lotus, el Spider carecía de cualquier concesión al confort y sólo equipaba lo esencial para conducir. Era un coche tan puro, que no equipaba ni dirección asistida, ni servofreno, ni calefacción. Sólo se ofrecían con dos opcionales; la radio y el parabrisas.
El puesto de conducción tenía lo esencial para conducir; un volante perfecto en cuanto a formas y tamaño, y unos excepcionales asientos de tipo baquet firmados por el especialista Recaro.
Construido sobre un chasis de aluminio, el Spider sólo pesaba 930 kg. Mecánicamente, contaba con el conocido motor F7R, que era el 2.0 litros de cuatro cilindros que montaba el Renault Clio Williams. Al igual que el Clio, el motor entregaba una potencia de 150 CV y un par motor máximo de 185 Nm. La transmisión también era manual de cinco relaciones.
Renault dejó de fabricar el Spider en 1999. Sólo se ensamblaron unas 1.900 unidades de las que sólo unas 60 tenían el volante a la derecha. Su precio está subiendo como la espuma y no nos cabe duda que es uno de esos coches de coleccionista que se convertirá en una joya muy preciada. Sin duda, un coche muy especial.
Toyota MR2: es el momento de hacerte con uno
El Toyota MR2 es un roadster compacto y ligero con una arquitectura de motor central-trasero en posición transversal, tracción trasera y cambio manual. Este modelo, lanzado al mercado a mediados de los 80, estuvo disponible con un total de tres generaciones. Nosotros nos vamos a quedar con la última, que es la que mayor protagonismo tuvo en España. Con un tacto de conducción mucho más deportivo que otros roadster equivalentes (por ejemplo, el Mazda MX-5), la tercera y última generación del modelo de Toyota es una buena opción de compra en estos momentos, sobre todo si buscas una alternativa más económica que un Lotus Exige o similares. Puedes encontrar unidades interesantes con una franja de precio entre los 8.000 y los 12.000 euros.
Esta última generación, conocida internamente como W30, nació en un momento en el que el mercado mundial de deportivos sufrió una importante ralentización pese a que había una amplia oferta en su momento, mucho más que en la actualidad. Debido a esto, Toyota fabricó pocas unidades (unas 27.000). En 2007 dejó de producirse.
Aunque contaba con una transmisión manual de 6 velocidades demasiado tosca, el MR2 de tercera generación era un coche ágil y muy divertido de conducir. Estaba animado por el archiconocido motor de gasolina de Toyota de 1.8 litros de distribución variable. Utilizado también por Lotus, esta motorización de cuatro cilindros entregaba 140 CV en el roadster de Toyota.
Artículo escrito por Gustavo Rodríguez