La grandeza de los coches clásicos pequeños

Con su encanto vintage y su diseño compacto, los coches clásicos pequeños no solo evocan una época pasada, sino que también representan la innovación y creatividad de una industria automotriz en constante evolución. 

¿Quieres saber más? En este post te mostramos algunos de los modelos más icónicos y originales.  

La grandeza de los coches clásicos pequeños

Los coches clásicos pequeños comenzaron a ganar popularidad en las décadas de 1940 y 1950. Tras la Segunda Guerra Mundial, se fabricaron diversos vehículos que no solo destacaban por su tamaño reducido, sino también por su precio asequible. ¿El objetivo? Abastecer a la población en general con opciones de transporte prácticas y económicas.

Entre los ejemplos más emblemáticos de estos coches encontramos el BMW Isetta y el Citroën 2CV, entre muchos otros. A continuación, profundizaremos en cada uno de ellos.

Citroën 2CV

El Citroën 2CV es uno de los vehículos más famosos del momento. Fue lanzado en 1948 y se mantuvo en producción hasta 1990, periodo en el que se fabricaron nada menos que 3,8 millones de ejemplares

Con una longitud de 3,8 metros y un peso de aproximadamente 600 kilos, el 2CV disponía en sus inicios de un motor de dos cilindros y cuatro tiempos de 375 cc que producía alrededor de 9 caballos de potencia, obteniendo una velocidad máxima de 60 km/h.

Además de su practicidad, el 2CV destacó por ofrecer un diseño innovador y funcional, adaptado para circular por todo tipo de terrenos, incluso los más complicados. Por otro lado, era muy asequible, convirtiéndose en la opción ideal para el usuario promedio. 

BMW Isetta

El Isetta fue uno de los automóviles más exitosos de su época. Diseñado originalmente por Iso, su producción continuó bajo licencia de varios fabricantes de automóviles, siendo BMW el más destacado, con la producción de 136 367 ejemplares.

Con una longitud de 2,3 metros y un peso de 330 kilos, el Isetta contaba con un motor de scooter monocilíndrico de 236 cc y 9,5 caballos de potencia. Este propulsor le permitía acelerar de 0 a 50 km/h en solo un minuto y obtener una velocidad máxima de 75 km/h, manteniendo un consumo eficiente de 3,5 litros por cada 100 kilómetros. En España, el Isetta se comercializó entre los años 1956 y 1961.

Messerschmitt KR175

El Messerschmitt KR75 es un microcoche comercializado entre 1953 y 1955 por el fabricante de aviones de combate Messerschmitt que alcanzó una producción total de 15 000 unidades. Además, este vehículo medía 2,80 metros de largo y montaba un propulsor monocilíndrico trasero de dos tiempos de 175 cc que entregaba 9 CV, permitiéndole conseguir una velocidad de hasta 70 km/h.

Lo cierto es que su diseño era de lo más peculiar, ya que contaba con una clara inspiración aeronáutica. Asimismo, el acelerador estaba en el manillar izquierdo y disponía de una caja de cambios de cuatro marchas sin opción de marcha atrás.

El Goggomobil se podía conducir con carné de moto

Goggomobil 

¿Otro de los coches clásicos pequeños que merece la pena conocer? El Goggomobil, un vehículo creado por Hans Glas entre los años 1954 y 1969 que se podía conducir con carné de moto. En España se produjo la versión T 250 (1962-1965) y 400 S (1966). En total, se vendieron 284 491 unidades y se estima que actualmente hay 2500 modelos funcionales. 

Los primeros Goggomobil carecían de parabrisas y contaban con ventanas correderas, que más tarde fueron sustituidas por ventanas de manivela. Además, se realizaron ajustes en las bisagras para permitir que las puertas se abrieran hacia atrás. Equipado con un motor de dos cilindros y dos tiempos, este pequeño vehículo ofrecía tracción trasera y una caja de cambios de cuatro velocidades.

Asimismo, se ofreció en tres modelos diferentes: el Goggomobil T, una versión en limusina de 2,9 metros de largo; el Goggomobil TS, una opción deportiva con una longitud de 3,055 metros; y el Goggomobil TL, una furgoneta que medía 2,91 metros de largo.

Seat 600 

El Seat 600 es uno de los pilares de la historia automotriz española. Este icónico modelo derivado del Fiat 600 se fabricó entre 1957 y 1973, consiguiendo vender casi 800 000 ejemplares. 

¿Y cuáles eran sus principales características técnicas? Con una longitud de 3,2 metros y un peso de 600 kilos, estaba impulsado por un motor trasero de 633 cc y 21,5 CV de potencia, logrando una velocidad de 95 km/h.

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